domingo, 29 de noviembre de 2015

J9 | Pipabar Regueiro 3-1 Pajarruca Luca

Nos costó más que nunca crear ocasiones, y eso quedó patente en un resultado que supone nuestra peor anotación en lo que va de Liga. Un sólo gol. 
Tercera derrota de la temporada. No supimos crear peligro ni ser constantes en nuestro juego. Ellos, en cambio, sacaron petróleo con un pivot inamovible y una defensa férrea. La primera parte tuvo tímidas llegadas de ambos, y la sensación era de que el gol podía llegar para cualquiera. Pero la claridad de las acciones era nula. Sin embargo, ellos golpearon primero. Sabíamos que teníamos que haber marcado antes. El 1-0 nos iba a costar remontarlo.

En la segunda parte, quisimos un juego de más velocidad, para aprovechar nuestras armas, pero fue imposible desajustar a su defensa, siempre con dos hombres asegurando la portería. Pero lo conseguimos. Alberto nos dio vida con el gol del empate. Jugada por banda que culminó con un disparo raso ante la salida de su portero. 1-1 que, desafortunadamente, duró menos que un billete en el suelo. En la siguiente jugada, la corpulencia de su pivot volivó a dejarnos por debajo en el marcador. Necesitábamos más de un jugador para frenar a su delantero, y no fuimos listos para defenderlo. 2-1 y el estado de ánimo volvía a ser favorable para ellos. 

No pudimos recuperarnos del mazazo después de tanto esfuerzo para marcar el empate. Lo intentamos, pero no fuimos capaces de más. Poco fútbol, pocas ocasiones y por ende, poca suerte. Ellos, nuevamente con su pivot de por medio, lograron el tercero. 3-1 y para casa con ganas de revancha. En la vuelta, ya sabemos la lección.

domingo, 22 de noviembre de 2015

J8 | Pajarruca Luca 2-2 Peña Madridista de Leganés

Segundo empate de la temporada, contra un rival difícil al que pusimos contra las cuerdas. 

Con el frío del recién llegado invierno tocó pelear en la cancha del Julián Montero por segunda vez este año, contra un equipo que no había perdido ni empatado hasta la fecha. Supimos hacerle frente con un buen partido, que pudo ser mejor si hubiéramos sido más contundentes en defensa. Empezamos adelantándonos con una gran gol de Alberto. Pase largo de Rubén, y el 6 pajarruco no perdonó en el mano a mano. Las sensaciones eran buenas. 

Al filo del descanso, ellos consiguieron su gol con un disparo que rebotó en la pierna de Rubén, y que desvió la trayectoria de la pelota, a la que no llegó nuestro portero. Suerte que nosotros no tuvimos en nuestras ocasiones. El partido estaba siendo competido, con algún calentón que otro fruto de un rival que jugaba al límite, algo plausible de no ser porque protestaban de más. Por suerte, el árbitro puso criterio amonestando los berrinches injustificados. En la segunda mitad, volvimos a ponerlos nerviosos adelantándonos de nuevo en el marcador. Contraataque y gol de Carlos para poner el 2-1.

Controlamos gran parte del segundo acto, pero nos faltó sentenciar. Era difícil descolocar al rival, siempre atento en nuestras transiciones. No lográbamos claridad en ataque, y ellos sí lograban encontrar peligro en sus ocasiones. Así terminó llegando su gol del empate, contra el que ya no pudimos hacer más. Segundo empate de la temporada en el que nos volvimos a dejar la piel, incluso el labio, por el Pajarruca. 

domingo, 15 de noviembre de 2015

J7 | Ballantinaikos 3-2 Pajarruca Luca

Fallar lo infallable es el resumen perfecto de lo que hicimos en un partido que merecimos ganar. Tuvimos ocasiones, pero no gol. 

Después de una jornada de descanso, volvimos a la cancha. Estuvimos sorprendentemente bien para habernos quitado las legañas minutos atrás. Pero nos faltó puntería para marcar las innumerables ocasiones que tuvimos. Es por eso que la derrota es imperdonable. Rubén abrió la lata aprovechando un rechazo del portero tras un potente disparo de Jaime. 1-0, al que contestaron con un gol de churro. Rebote en la pierna de Luis, y nuestro portero no pudo más que mirar cómo esa pelota entraba llorando. Una primera parte en la que Jaime y Carlos fallaron sendos mano a mano ante, todo hay que decirlo, un gran portero rival. Paraba todo lo que le echaras.

Ya en la segunda parte, volvimos a adelantarnos. Jaime no faltó a su cita con el gol, y en uno de sus muchos disparos, encontró portería. Un 2-1 que supimos aguantar bien, pero no encontramos la manera de ampliar. La ventaja era escasa, y el empate llegó con un contraataque de los naranjas. Disparo cruzado y 2-2. Estábamos pagando caro la falta de acierto.

El partido estaba en la mitad de una balanza que podía caer para cualquier bando. Nuestras continuas ocasiones parecían decantar la inercia del partido hacia nuestro lado, pero la persiana se nos bajaba en los metros finales. Todo fuera, todo detenido por su portero. Y cuando conseguíamos superarlo, la defensa sacaba el gol en la línea. Ellos no perdonaron tanto, y consiguieron poner el 3-2 definitivo. Nosotros lo intentamos hasta el final, pero no fue el día de entablar amistad con esa gran amiga del crack que no somos. La puntería. 

domingo, 1 de noviembre de 2015

J5 | Los Hierros 2-5 Pajarruca Luca

Gran victoria del equipo en La Cantera, para lograr la segunda consecutiva, y la tercera de la temporada. El equipo estuvo fino en ataque y en defensa. Bastó para ganar.


El esfuerzo tuvo recompensa. Jugamos bien, y como consecuencia natural llegaron los goles. Los espacios que genera una cancha como la de La Cantera nos vino bien para un equipo de velocidad como el nuestro. Así, en una falta recibida por un contraataque, Jaime puso el 1-0 con un disparo raso que se coló entre la barrera. Ellos creaban ocasiones, pero su puntería no estaba fina, y sin más goles llegamos al descanso.

En la segunda mitad tuvimos más acierto. En una buena presión de Jaime sobre el portero, que sacaba la pelota jugada demasiado lejos de su arco, el 21 pajarruco consiguió robarle el esférico. En una buena combinación con Rubén, Jaime ponía el 2-0. La presión les hacía daño, y se corroboró en la siguiente jugada. Otra buena presión de los nuestros provocó una pérdida que aprovechó Rubén para marcar el 3-0. La ventaja era grande, y no nos hizo demasiado daño el 3-1 que ellos consiguieron posteriormente. 

La sentencia llegó con el 4-1 de Carlos, que en un contraataque cruzó la pelota al palo largo para conseguir su golito. Nunca falla. El partido estaba totalmente controlado, a pesar del 4-2 con el que ellos cerraron su casillero. Teníamos renta suficiente para jugar sin miedo. Para cerrar el partido, Luis puso el 5-1 con un disparo ambicioso desde el córner que se terminó colando entre las mallas. Final y victoria. Suma y sigue el Pajarruca.